Por lo general, las técnicas de pintura decorativa, son muy fáciles de aprender y realizar, sobre todo cuando hablamos de las básicas. El secreto radica únicamente en tener algo de paciencia para conseguir, poco a poco, dominar la técnica, esto implica cometer errores al principio, errores que con el paso del tiempo y la adquisición de práctica se irán corrigiendo hasta desaparecer y convertirnos en expertos decoradores.
Hoy aprenderemos a hacer un tipo de decoración muy fácil y para el cual no se necesita mayor destreza ya que toda imperfección puede ser aprovechada como parte del acabado que quiso darse.
Se trata de una decoración floral con relieve y acabado rústico, ideal para decorar superficies planas en muebles, accesorios o muros. Puedes variar la plantilla por el diseño que prefieras.
Materiales:
Mueble o superficie para decorar
Lápiz blanco
Pasta para relieve (la puedes encontrar en tiendas de materiales para arte)
Espátula
Regla
Plantilla
Cinta adhesiva de papel
Bisturí o cuter
Betún de judea
Cera incolora
Paño suave y limpio.
Procedimiento:
Lo primero que harás será delimitar el espacio donde quieres realizar la decoración, hazlo midiendo bien con una regla y marcando el área.
Fija el diseño sujetando con ayuda del papel adhesivo, después pasa la pasta para relieve con, la espátula, sobre la plantilla. Intenta poner una generosa capa de pasta para lograr mayor relieve.
Después de haber aplicado la capa de pasta, retira la plantilla con cuidado de no deformar el diseño y deja secar muy bien. Recuerda que no debes preocuparte por alguna imperfección que se produzca al momento de retirar la plantilla ya que esta solo formará parte de la textura del relieve.
Una vez seca la figura, pasa una capa de mezcla entre el betún de judea y la cera incolora, a toda la superficie. Deja secar unos minutos y pasa el paño dejando luces y sombras.
Listo, ya tienes la decoración que hacía falta. Rápido, fácil y barato.
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