No sé si solo me pasa a mí, pero, cada vez que decido cuidar mi alimentación y dejar de comer es placeres que terminan por engordarnos rápidamente, me llegan ocasiones en la que pareciera imposible poder renunciar a esos manjares que habíamos decidido olvidar tan solo unos días antes.
Invitaciones, regalos, propuestas y todo lo que esté relacionado con almuerzo, cenas, aperitivos viene por montones y si bien es cierto no podemos escondernos del mundo y negarnos a continuar nuestra vida social, es bueno ponernos por delante la meta que nos hemos trazado.
Si por ejemplo tus amigos puedan para encontrarse en un bar, no dejes de asistir, obviamente deberás tener la fuerza de voluntad para cambiar el alcohol por agua o por un zumo natural de frutas.
Si te invitan a un restaurant, disfruta del almuerzo o cena eligiendo las opciones menos calóricas de la carta pero tampoco te castigues y te niegues a un gustito.
Y si te invitan a salir de viaje o de paseo todo el día, no dejes de hacerle un tiempo a tus ejercicios, aunque sea menor al tiempo habitual, ejercítate, esta es la única manera de mantener un peso adecuado y sentirte bien.
Siguiendo estos pasos sencillos y obviamente teniendo a fuerza de voluntad para mantener un régimen alimenticio y un ritmo de vida activo con rutinas de ejercicio diarias, verás que logras obtener un peso ideal y disfrutar de una vida social plena.
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