Quien no ha tenido más de una molestia con el mouse en el escritorio... a decir verdad, cuando este indispensable aparto no funciona bien, no podemos trabajar ni fácil ni rápidamente.
Lo mejor para evitar este tipo de problemas es, evidentemente, recurrir a un padmouse, estos los encontramos fácilmente en tiendas especializadas pero, por qué no hacer uno con nuestras propias manos?, además de ser original nos resulta más barato, más decorativo y más personalizado.
Para empezar debes tomar en cuneta que la superficie donde queramos utilizar el mouse debe ser rugosa o texturada, por eso elegí el corcho como material de base, tu puedes optar por el mismo material o por otro pero que sea texturado.
Además de la lámina de corcho, necesitarás pintura acrílica, pinceles, cinta adhesiva, lápiz y tijeras.
Coloca la cinta adhesiva en la superficie, puedes formar lineas, cuadrados o cualquier otro diseño que prefieras. Pega bien la cinta.
Empieza a pintar la superficie libre de cintas en el corcho, deja secar y da una o dos capas más para que el acabado sea más prolijo.
Cuando la pintura esté seca, marca suavemente los bordes de la cinta con un cuter, para que la pintura se desprenda y no la jales al retirar el adhesivo.
Eso es todo lo que debes hacer para crear un padmouse personalizado. Recuerda que si tienes destreza con las manos y dominas técnicas de pintura, puedes incluir cualquier otro diseño en la superficie.
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