Más conocida como Cielo estrellado, esta planta es de muy fácil cultivo, es perenne y resistente, tiene flores parecidas a las margaritas y de un amplia gama de colores, generalmente amarillas en el centro.
En las épocas fría o templado-cálida plántala en una maceta orientada al sol con por lo menos unos 30 cm. de separación entre planta y planta.
Riega abundantemente en tiempo seco, poda bien después de la floración. Replántala cada año y propaga por división al replantar.
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